“Momentos de la verdad + Identidad de la firma” marcan la diferencia ante el cliente y que deben ser interiorizados por todos los profesionales del despacho
Además de prestar un buen asesoramiento jurídico o económico, de ganar el caso o de prevenir un posible problema, existen una serie de detalles que el asesor debe cuidar. En un sector en el que existe tanta competencia, lo que puede llegar a distinguir un profesional de otro son precisamente esas atenciones que a continuación enumeraremos.
Para empezar, el primer encuentro. Dicen que las primeras imágenes o sensaciones que recibe un cliente del asesor (o de una firma) son fundamentales. Por ello, es muy importante cuidar hasta el último detalle, ya sea relativo al espacio físico en el que tendrá lugar el primer encuentro (despacho) o bien a todo el personal, sobre todo el de contacto (recepción, atención telefónica, etc.).
Este momento puede tener lugar en el domicilio social del cliente, en un acto público, o en el propio despacho del asesor. Pero no olvidemos que también puede ser una llamada telefónica del cliente potencial, que acaso tenga buenas referencias del profesional. Por ello, la persona que atiende el teléfono debe tener mucho tacto a la hora de atender las llamadas.
Partiendo de que el primer examen con el cliente se haya pasado satisfactoriamente, a continuación, enumeraremos algunos consejos y aspectos claves de la relación que acaba de nacer, entre el cliente y el profesional. Con todos ello lo que se busca es la llamada fidelización de los clientes, que en definitiva consiste en ganárselos día a día.
DESPACHOS PROFESIONALES (CDDP)