La forma en que las empresas operan en la actualidad es radicalmente distinta a como lo hacían hace diez o quince años. Debido a las exigencias del cambio organizacional, el Covid y la transformación digital, un 88% de los ejecutivos entrevistados (más de 10.000 líderes de todo el mundo) por la consultora Deloitte, consideran importante reflexionar sobre el modelo organizacional de sus empresas.
Lógicamente, los directivos de los despachos profesionales no deberían estar al margen de esta tendencia. Necesitan también repensar el futuro de sus organizaciones. Para ello, es imprescindible saber hacerse preguntas oportunas e inteligentes, como explicaba muy bien Xavier Marcet en su artículo “Preguntas transformadoras” en la Vanguardia (Dinero). Como ejemplo de hacerse preguntas inteligentes, Marcet nos recomienda y cita al gran Peter Drucker. En sus libros podemos encontrar las cinco preguntas más importantes que una organización, dígase también despachos profesionales, pueden o deberían plantearse:
1º ¿Cuál es nuestra misión?
Como firma tenemos definido e interiorizado de una forma breve y concisa nuestro propósito. Es necesario saber explicarlo de un modo breve y conciso. Este ejercicio sin duda nos ayudará a poner foco en lo que sabemos hacer y priorizar esfuerzos.
2º ¿Quiénes son nuestros clientes?
Quiénes son los clientes actuales que nos están manteniendo el negocio y los que en los próximos 5 años nos permitirán continuar evolucionando como firma. ¿Los tenemos identificados? ¿Seremos capaces de continuar prestándoles servicios?
3º ¿Qué valoran nuestros clientes?
Muchos directivos de firmas saben que sus clientes les “compran” servicios por inercia durante años, pero no sabrían explicar la razón profunda de por qué les compraron la primera vez y por qué continúan y, naturalmente, tampoco saben o se preguntan por qué pierden clientes.
4º ¿Cuáles son nuestros resultados?
Esta pregunta es la que nos pone ante el espejo, no valen excusas. Es decir, ¿tenemos buenos resultados ahora y nuestra solvencia como firma es sólida? No olvidemos que una firma profesional también es una empresa, y esta solo podrá competir si tiene buenos resultados económicos.
5º ¿Cuál es nuestro plan?
Esta es la pregunta más determinante, es decir cuál es nuestra agenda de actuación. Como explicaba Drucker, después de las reflexiones de los directivos y de los equipos, en las organizaciones “lo realmente importante es lo que pasará el próximo lunes”.
¿Tenemos un plan para el 2021?
Aunque estas preguntas son un “clásico”, continúan siendo vigentes y útiles, y si nos las planteamos en serio, seguro que nos ayudarán a innovar y a cambiar nuestras organizaciones.
Les deseamos una feliz Navidad y un próspero 2021
DESPACHOS PROFESIONALES (CDDP)
Estrategia